Hoy deseo decirles que, nos acostumbramos a una manera de ser, de ver, se estudia, se recalca en los medios, lo recalcan los personajes, se pone de moda, está desde antes que nuestros bisabuelos y eso nos hace percibir y dar por hecho lo que es la "realidad"
Desde que entendí, comprendí desde lo profundo de mi existencia, con mi alma, no podré vivir de otra manera, soy de ésta manera y esta manera de ser la he trasladado a mi empresa y lo pregono en mi libro, porque simplemente mis amigos los demás es espuma.
No hay felicidad mayor que la que nos da Dios, pero no está fuera de nosotros, ni en lugar alguno, que aquí y ahora. Es difícil comprenderlo y buscándola muchas veces dañamos a otros pero con intención de dañar.
De la forma que lo hice yo también dañé sin intención de dañar, a eso me refiero lo difícil que es, y ese es el precio que he pagado.
Para hacer éste tipo de empresa no sólo he derramado lágrimas y sudor de sangre, sino que he renunciado a amigos, grandes amigos, renunciado mi propia familia. Los amo con mi alma, justamente porque los amo he renunciado a ello y a ellos.
Como hice eso, me ha dado mayor fuerza para gritar por los cuatro vientos CON GOZO Y LA DICHA de saber que estoy en mi interior intacta y más grande, más pura en mi alma, más hermosa y más sana, más clara, elevada en mi espíritu.
¿Díganme sino es para gritar de GOZO y ALEGRÍA por ello?
Por ello mis amigos no puedo hacer otro tipo de empresa que ésta y de ésta forma, perdón te he pedido en mi interior a ti que sin pretender enseñarte te enseñé, sin pretender empujarte a sentirte traicionado te empujé a ello. Sin pretender alejarte de mí, te alejé. Yo aprendí de ello también. Por ello te pedí perdón, yo me perdoné y estoy segura que tú o me has perdonado o me perdonarás en tu interior también.
Esa es la nobleza de amar, esa es la enseñanza de nuestro señor Jesucristo si te abofetean en una mejilla, entregarle también la otra mejilla. Muy buenos días mis amados amigos. Nilda TORRES FIGUEROA.
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